Las personas aprendemos por imitación, por eso se dice a menudo que los niños aprenden más gracias a lo que ven que a lo que les dicen. Esta evidencia es a la vez una oportunidad: la de educar a través del ejemplo. Cualquier gesto que hagamos en casa ayuda a que los más pequeños aprendan la importancia del ahorro energético y el consumo responsable.
Seis hábitos para los más pequeños
Os presentamos seis tips que contribuirán a que toda la familia sea consciente de la importancia de no malgastar, y así ayudar cuidar del planeta y de la economía familiar.

1. Pensemos antes de abrir la nevera
La abuela tenía razón: pensar antes de abrir la nevera contribuye al ahorro energético. Enseñar a los niños a ser conscientes de este acto cotidiano, incluso cuando exploramos los estantes de un supermercado, forma parte de la educación hacia un consumo responsable.

2. Elijamos una canción para controlar el tiempo de la ducha
Ahora, es más importante que nunca hacer un uso responsable del agua. Establecer límites de tiempo para la ducha, acompañados de una canción agradable, no solo hace divertido el proceso, sino que también contribuye a la conciencia de este recurso vital.

3. Las 4R: Reducir, Reutilizar, Reciclar y Recuperar
En casa y en la escuela, son numerosas oportunidades para poner en práctica nuestra consciencia ambiental con las 4R: Reducir, Reutilizar, Reciclar y Recuperar. Transformar cajas y botes de cristal para guardar tesoros; reciclemos en familia y exploremos la posibilidad de reparar en lugar de desechar, son pasos fundamentales.
4. Ropa acorde con el tiempo que hace
Vestirse de manera acorde a la temporada es análogo a usar la energía de manera eficiente. Animemos a los pequeños a seleccionar la vestimenta adecuada según el clima. Con esa pequeña reflexión se reduce la necesidad de recurrir a la calefacción o al aire acondicionado innecesariamente, contribuyendo al ahorro energético.

5. Apaguemos las luces que no necesitamos
Enseñar a los niños a encender las luces solo cuando sea necesario y apagarlas al salir de una habitación, crea hábitos responsables que perdurarán a lo largo de sus vidas.